Habitar (y vacunar) en Omelas: una ética del nosotros
Es el primer día de verano en Omelas. Todo es resplandeciente. La ciudad disfruta de su festival en un ambiente de comunidad cohesionada, alegre y culta. Nada parece ir mal. Omelas solo tiene un inconveniente: para conservar su equilibrio y felicidad es necesario mantener a un niño en la más absoluta pobreza y marginación. Al…